miércoles, 5 de mayo de 2010

Un oasis nuclear en Oriente Próximo


ISRAEL: SU ESTRATEGIA DISUASIVA SE CENTRA EN TENER LA EXCLUSIVIDAD NUCLEAR EN LA REGIÓN

La ambigüedad y el secretismo han sido la constante en todos los gobiernos israelíes. Hasta Ehud Olmert, en un lapsus, reconoció que tenían la bomba.

Fernando B.
Diagonal
Martes 4 de mayo de 2010. Número 125

Según diferentes estudios, Israel posee entre 75 y 400 cabezas nucleares, lo que lo convierte en el único país de Oriente Medio en poseer este tipo de armamento. El hermetismo que rodea al programa nuclear israelí, cuyos inicios se remontan a los años ‘50, impide conocer las dimensiones exactas del arsenal. Con ayuda de Francia y Reino Unido, Israel construyó la central nuclear de Dimona, en el desierto del Neguev, que en 1965 se encontraba operativa y en condiciones de producir plutonio al nivel requerido para uso militar.

David Ben Gurion, uno de los padres del Estado de Israel y primer ministro entre 1948 y 1963, declaró que la central nuclear tenía “fines exclusivamente pacíficos”. Pero los hechos irían haciendo insostenible esta afirmación. Desde entonces, los líderes israelíes han mantenido una política de “ambigüedad nuclear”: convertido en tema tabú, nunca se ha reconocido ni tampoco negado la existencia del arsenal atómico. Esta política de imprecisión se vino abajo cuando el primer ministro Ehud Olmert declaró, en una entrevista con la cadena alemana N24 en diciembre de 2006, que “Irán aspira a tener un arma nuclear como Estados Unidos, Francia, Israel y Rusia”. Tampoco se tiene evidencia de la realización de pruebas nucleares por parte de Israel. Sin embargo, en septiembre de 1979 el satélite estadounidense Vela, diseñado para detectar explosiones nucleares, registró un destello al sur del océano Índico. Una comisión investigadora en EE UU, encargada por el presidente Carter, estableció que no había evidencias suficientes para confirmar o desmentir el origen del resplandor, aunque en un principio se atribuyó el destello a una prueba atómica. Sin embargo, Aziz Pahad, viceministro de exteriores de Sudáfrica en el Gobierno de Nelson Mandela, reconoció en 1997, en una entrevista con el periodista israelí Yossi Melman en el diario Haaretz, que el fogonazo detectado por el satélite Vela fue “una prueba nuclear” llevada a cabo por Israel y Sudáfrica. Según Pahad, “el tema nuclear era secreto, y se han destruido muchos documentos, pero quedan muchos informes que prueban la relación entre los dos países”.

Desde entonces, y gracias a su abultado gasto militar (7,3% del PIB, el sexto país en gasto militar según CIA World Factbook), Israel ha desarrollado la capacidad de lanzar sus armas nucleares desde tierra, con silos subterráneos que albergan los misiles Jericó, con un alcance de más de 11.000 kilómetros, capaces de alcanzar cualquier punto de África, Europa y Asia; desde el mar, con submarinos clase Dolphin de fabricación alemana; o desde el aire, con cazabombarderos F-16 y F-35 de fabricación estadounidense. Según el veterano periodista Seymour Hersh, Israel también tendría capacidad para miniaturizar una bomba que cupiese en un maletín.

Monopolio nuclear

En posesión de la bomba, Israel se ha concentrado en mantener la “superioridad nuclear” en Oriente Medio. Así, su objetivo ha sido evitar que otros países de la región desarrollasen capacidad nuclear, mediante sabotajes, ataques militares y acciones encubiertas del Mossad. Como ejemplos: la destrucción del reactor nuclear de Osirak (Iraq) en 1977, o el bombardeo de una instalación siria, en 2007, donde, según el diario Washington Post, se estaba construyendo una planta nuclear con asistencia norcoreana.

Hasta ahora, el uso del arsenal nuclear ha quedado descartado salvo en cuatro supuestos. Según publicó el politólogo Scott Sagan, en Planeando lo impensable: cómo las nuevas potencias usarán las armas nucleares, el aparato de Defensa israelí estableció en los años ‘60 las líneas rojas que, de cruzarse, llevarían a Israel a utilizar su arsenal:

1) Una penetración exitosa por parte de los países árabes en el territorio israelí posterior a la guerra de 1949.

2) La destrucción de la Fuerza Aérea israelí.

3) Bombardeo de saturación o ataques con agentes químicos o biológicos sobre ciudades israelíes.

4) El uso de armas nucleares contra Israel.

Estos planteamientos fueron formulados por primera vez por Ben Gurion, aunque no se concretarían hasta la llegada al poder de Levi Eshkol, a mediados de los ‘60. Según el historiador Avner Cohen, era la posibilidad de un ataque por parte de una coalición de países árabes lo que llevó a los dirigentes israelíes a desarrollar el arma atómica, de modo que Israel tuviese un “último resorte”, oficialmente denominado “Opción de Sansón”.
--------------------------------------------
Irán/USA - altibajos del renovado "romance"‏

De: Petrosino (petro@s6.coopenet.com.ar)

Como en toda relación que se recompone existen las "de cal y las de arena", estas últimas en este caso están a cargo de la inefable Hillary, como podemos ver en el art. de hoy de la revista Aurora adjunto infra.
La frustrada pre-candidata presidencial(¡por suerte para el mundo!), no deja absurdo por fatigar en su malhadada respuesta al discurso certero y pertinente del presidente Ahmadinejad en la conferencia por la revisión de TNP(Tratado de No Proliferación nuclear) que se está realizando en la sede de la ONU en Nueva York.

Dice la muy reventada que Irán pretende "desviar la atención de su programa nuclear"????. Lo cual es justamente lo opuesto de lo que viene ocurriendo.

Irán, uno de los suscriptores del TNP, se ha ajustado en todo momento a lo establecido en sus estatutos para el desarrollo de su programa núclear, que de ninguna manera contempla la posiblidad de construcción de armas.
Algo que la OIEA(Agencia Internacional de la Energía Atómica) dependiente de la ONU, ha verificado puntualmente. Según lo ha dejado claro en todo momento su director hasta hace poco, el Premio Nobel de la Paz, Mohamed Al Baradei.

Lo que la inicua alega como "incumplimientos" son pretenciones fuera de reglamento, vehículizadas por el nuevo director de la OIEA, más permeable a las presiones que su ilustre antecesor, que no se basan en ningún elemento objetivo, sino en "sospechas", fundadas en mentiras(como las "armas de destrucción masiva" de Sadam Husein), que tienen por único objeto fabricar excusas para dañar a Irán, aprovechándose de que éste, como país soberano, no puede resignar sus derechos legítimos ante presiones.

"Las absurdas acusaciones"(a Estados Unidos) alegadas no son otra cosa que los planteamientos razonables formulados por Ahmadenijad en la conferencia, en cuanto a que el verdadero peligro para el mundo, son los arsenales nucleares existentes, que Estados Unidos y "asociados" usan como amenaza para el logro de sus objetivos estratégicos y no los eventuales que otros países en desarrollo podrían adquirir, que aún si se concretaran serían ínfimos en comparación con los de estos y de inocua efectividad.

Vg.: Ahmadenijad dijo entre otras cosas: "las armas nucleares son indignantes y vergonzosas y le reprochó a USA y a sus aliados de usar el miedo a la proliferación nuclear para evitar que los países en vía de desarrollo accedan a la tecnología nuclear para usos civiles, en violación al Tratado de No Proliferación Nuclear".(ver: art. de IRNA en francés: "Le président iranien qualifie les armes nucléaires de "révoltantes et honteuses").).

También es falso que Irán "haya rechazado la mano que le extendió Obama al asumir", por el contrario recibió tal acto con indisimulada satisfacción y alivio(no debe ser nada grato tener a la 6ta. flota del Imperio "respirándole en la nuca" en el Golfo Pérsico), reconociendo y agradeciendo el cambio de conducta con relación a la de sus antecesores, que pretendían una sumisión completa, no una negociación. JP.
=================================================================================

http://www.aurora-israel.co.il/articulos/israel/Newsletter/28979/?utm_source=Noticias+diarias+Martes-TEA&utm_medium=04-05-2010%202da%20edic
Aurora Digital


Publicado 04/05/2010
Amenaza estratégica
Clinton desestimó que la política de EEUU sea una amenaza para Irán
“Irán no desviará la atención con acusaciones absurdas”

La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton (foto), aseguró ayer que Irán no logrará desviar la atención sobre su programa nuclear con acusaciones "absurdas" y exigió a Teherán que cumpla con sus obligaciones internacionales.

"Irán no triunfará en sus intentos de dividir y desviar la atención", dijo la responsable de la diplomacia estadounidense en su intervención ante la conferencia de revisión del Tratado de No Proliferación (TNP).

Aseguró que el duro discurso contra Washington que pronunció horas antes en ese mismo foro el presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, es un intento de evitar responder por su incumplimiento de los mandatos del Consejo de Seguridad y las inspecciones del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).

"Esta mañana, el presidente de Irán ofreció las mismas acusaciones viejas, gastadas y, algunas veces, absurdas, contra Estados Unidos y otros asistentes a esta conferencia", observó ayer Clinton.

Asimismo, señaló que "Irán es el único país presente en esta sala sobre el que la junta de gobernadores del OIEA ha declarado que incumple en la actualidad sus obligaciones".

"Ha desafiado el Consejo de Seguridad y el OIEA, y por eso afronta el aislamiento y la presión de la comunidad internacional", resaltó.

En una conferencia de prensa posterior, Clinton desestimó las afirmaciones de Ahmadinejad de que la política nuclear de Estados Unidos supone una amenaza para países como Irán.

"No parece que el presidente de Irán viniera a esta conferencia con la intención de mejorar el TNP, tal como lo ha hecho la mayoría de los asistentes a la conferencia", señaló.

La secretaria de Estado aseguró que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, "extendió la mano" a Teherán "ni bien llegó a la Casa Blanca en enero de 2009, pero el Gobierno iraní la ha rechazado".

No hay comentarios: