domingo, 18 de octubre de 2009

Cómplices y mentirosos en el genocidio del pueblo palestino (Sobre el viaje de ZP a Oriente Próximo).


Por Gabriel y Cristina
Málaga

Con frecuencia, hay noticias en los medios que pasan desapercibidas y no les damos su importancia. Esto pasa también cuando nos falla la memoria, y la avalancha de información sobre otras cosas (muchas de ellas insignificantes comparadas con la gravedad de lo que quiero exponer) hacen que no recordemos lo que ciertos políticos dijeron e hicieron, hace escasos meses. Sin duda, es otra forma de camuflar la realidad, de borrar la historia, y no creemos que carezca de intencionalidad.Nos referimos a la visita del presidente Zapatero a Oriente Próximo, y sus declaraciones en Ramallah sobre el conflicto Palestino “España va a mojarse por el reconocimiento del Estado palestino”.

El señor Zapatero parece haberse “olvidado” de todo lo que ha hecho ya este año por el pueblo palestino, o cree que todos los ciudadanos nos hemos olvidado de cómo “se ha mojado”(y bien), pero no precisamente por el pueblo palestino.
Hagamos un poco de memoria, el 27 de diciembre de 2008, Israel lanzó un ataque brutal contra la población de Gaza, mató a más de 1.300 personas (la mitad de ellos civiles y más de 300 niños), a una población (de más de un millón y medio de personas) completamente sitiada, incomunicada, en un campo de concentración gigantesco con problemas de luz, agua, comida, y al borde de la catástrofe humanitaria. Se destruyeron casas, colegios, infraestructuras civiles e incluso de la ONU, se utilizaron armas prohibidas por la legislación internacional, se prohibió la entrada de testigos y periodistas (todavía hoy siguen vetando la entrada y continúa el cierre de Gaza) e incluso se llegó a negar a la Cruz Roja el acceso para auxiliar heridos. El gobierno español se limitó a hablar de la “desproporcionalidad” de los ataques, y se negó a suspender relaciones diplomáticas con Israel o interrumpir el comercio de armas con un país que viola sistemáticamente los derechos humanos, que ya lleva muchos años despreciando el derecho internacional: masacres de población civil, torturas, construcción de asentamientos, construcción del muro declarado ilegal, destrucción y expropiación de tierras, etc...A pesar de la masacre de Gaza, no hubo apenas respuesta ni presión internacional, y tampoco del gobierno de Zapatero, para frenar la escalada de terror de Israel, su impunidad y sus continuos crímenes contra la humanidad. Sin embargo, la ciudadanía y las organizaciones sí hicieron algo, y miles de personas se manifestaron en las calles. Pero además, el 29 de enero de este año la audiencia nacional admitió a trámite una querella contra siete militares israelíes, por una matanza de población civil cometida en la franja de Gaza el 22 de julio de 2002. El juez Fernando Andreu admitió a trámite esta querella que se presentaba en amparo de la jurisdicción universal: "en virtud de la legislación española y de los acuerdos internacionales firmados por España, la Audiencia Nacional es competente para investigar los posibles delitos contra la humanidad cometidos fuera de España aunque en ellos no esté implicado, como víctima o como ejecutor, ningún ciudadano español”.Expertos en derecho internacional llevaban años trabajando para que los delitos cometidos por Israel pudieran ser juzgados incluso en otras partes del mundo, teniendo en cuenta la gravedad de los mismos, son crímenes contra la humanidad: genocidio, crímenes de guerra y torturas. Si el estado de Israel y sus tribunales quería hacer la vista gorda sobre las atrocidades y violaciones continuas de derechos humanos de sus militares y políticos (que recuerdan a otros episodios de la historia del siglo XX) sus responsables tendrían entonces que dar cuenta de delitos tan graves en tribunales fuera de Israel. La historia del siglo XX no podía volver a repetirse...La reacción a esta querella no se hizo esperar en Israel: el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, afirmó que "haría todo" por anular la querella. Y el entonces líder del ultraconservador Likud, Benjamin Netanyahu, calificó de "ridícula" la decisión el juez español, según recogía el diario Haaretz.La respuesta del gobierno español tampoco se hizo esperar: el 31 de enero saltó la noticia de que el ministro de exteriores, M.A. Moratinos había prometido cambiar la ley para frenar la querella del juez Andreu. Así lo afirmó su homóloga, la ministra de exteriores israelí Tzipi Livni, que se congratulaba de que España hubiese decidido atajar la jurisdicción universal. Moratinos insistía posteriormente una y otra vez en que eso no era cierto y que no iba a cambiar se la ley. Parece ser que la condición que había puesto a Tzipi Livni es que no hiciese público el acuerdo, pero Israel tampoco cumplió en esto y dejó en evidencia al gobierno español.El 20 de Mayo de este año PSOE y PP conjuntamente (como en tantas otras cosas) dinamitan el Principio de Jurisdicción Universal “de tapadillo”. En el mismo pleno del parlamento en el que se discutían las propuestas sobre la crisis, de manera camuflada se presenta también una propuesta de enmienda en el proyecto de ley de Reforma de la legislación procesal para limitar el principio de jurisdicción universal.Se cumple así la promesa que Moratinos hizo a Tzipi Livni para modificar la jurisdicción universal en España y evitar que militares y políticos israelíes puedan ser juzgados en España por estos gravísimos delitos. A partir de ahora los genocidas, torturadores y criminales de guerra, tienen un poco más de libertad e impunidad gracias a este acuerdo PSOE - PP. El calor veraniego y otras noticias servirían también para tratar de ocultar la posible repercusión social de semejante atentado contra los derechos humanos y, a pesar de las críticas de numerosas organizaciones sociales y expertos en derecho internacional, el 7 de Octubre el Senado aprobó la reforma e incluso fue más allá: tras consagrar la impunidad, eliminaron también del texto el término “crímenes de guerra”. En el debate, el senador socialista Arturo Díaz Tejera y el del PP Agustín Conde se “encendieron”: “No consentiremos, que se nos sitúe al lado de los torturadores!”, pero ya se situaron ellos solos. El jueves 15 de Octubre se remataría la faena, sólo votaron en contra IU, ICV, ERC y BNG (también es justo decirlo).El viernes 16 de Octubre, leemos en la prensa que en la visita de Zapatero a Oriente Próximo, el presidente israelí, Simon Peres, ha agradecido a Zapatero que la Audiencia Nacional archivara en junio la causa abierta contra siete responsables militares de Israel (entre ellos el ex ministro de Defensa Benjamin Ben-Eliezer) por el bombardeo del ejército en Gaza del 22 de julio de 2002 en el que murieron 14 civiles. En una declaración conjunta tras reunirse en Jerusalén, Peres ha agradecido expresamente a Zapatero las "posiciones adoptadas en las últimas semanas para que no se llevara ante los tribunales al líderes israelíes tanto civiles como militares que no han hecho sino defender las vidas de su pueblo".Y después de ésto, de haber cerrado otra puerta para que masacres como la de las pasadas navidades pudieran ser juzgadas, nos dice Zapatero que España va a mojarse en todo ésto ¿en qué dirección señor presidente? ¿otra vez con los genocidas?


Gabriel Ruiz Enciso y Cristina Ruiz Cortina Sierra
Asociación Al Quds de Solidaridad con los Pueblos del Mundo Árabe
www.alqudsmalaga.org
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Fecha: 18/10/2009

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