14-11-2009
Guillermo Nova
Rebelión
Recientemente se ha editado el libro El soldado solitario: la guerra privada de las mujeres que sirven en Iraq , basado en 40 entrevistas donde se recogen las historias de mujeres que se desempeñaron como soldados y cuentan violaciones, abusos y acosos sexuales por parte de sus compañeros.
El número de denuncias de ataques sexuales creció un 8 por ciento en el 2008 y un 25 por ciento en Iraq y Afganistán, registrándose un total de 2.908 denuncias, incluyendo abusos o intentos de violación.
La autora Helen Benedict, profesora de periodismo en la Universidad de Columbia en Nueva York, afirmó que el título del libro nació del “aislamiento que las mujeres soldados experimentan al tener que manejar el trauma de sus deberes combativos y el constante acoso sexual del colectivo masculino donde se desenvuelven”.
Según estadísticas del Departamento de Defensa, en Iraq y Afganistán el diez por ciento de los soldados son mujeres y en estos dos conflictos han muerto más mujeres que en cualquier conflicto bélico desde la Segunda Guerra Mundial.
Los propios mandos del ejército estadounidense además de no ser capaces de controlar las calles de Bagdad tampoco pueden controlar a sus soldados dentro de los propios cuarteles y por eso han recomendado a las mujeres soldados que no vayan solas a las letrinas por la noche o que lleven siempre encima un cuchillo para defenderse en caso de ser atacadas.
Otro libro Dissent: Voices of Conscience de la veterana coronela Ann Wright, afirma que estos episodios se han vuelto ahora más vergonzosos a partir de que muchas mujeres han aparecido muertas después de haber sido violadas, a las que el Pentágono las califica como “caídas en situaciones no combativas”.
En la mayoría de los casos la impunidad es la tónica dominante no siendo llevados ante la justicia a los culpables de estos crímenes.
Escribe el resto de tu post aquí.
Guillermo Nova
Rebelión
Recientemente se ha editado el libro El soldado solitario: la guerra privada de las mujeres que sirven en Iraq , basado en 40 entrevistas donde se recogen las historias de mujeres que se desempeñaron como soldados y cuentan violaciones, abusos y acosos sexuales por parte de sus compañeros.
El número de denuncias de ataques sexuales creció un 8 por ciento en el 2008 y un 25 por ciento en Iraq y Afganistán, registrándose un total de 2.908 denuncias, incluyendo abusos o intentos de violación.
La autora Helen Benedict, profesora de periodismo en la Universidad de Columbia en Nueva York, afirmó que el título del libro nació del “aislamiento que las mujeres soldados experimentan al tener que manejar el trauma de sus deberes combativos y el constante acoso sexual del colectivo masculino donde se desenvuelven”.
Según estadísticas del Departamento de Defensa, en Iraq y Afganistán el diez por ciento de los soldados son mujeres y en estos dos conflictos han muerto más mujeres que en cualquier conflicto bélico desde la Segunda Guerra Mundial.
Los propios mandos del ejército estadounidense además de no ser capaces de controlar las calles de Bagdad tampoco pueden controlar a sus soldados dentro de los propios cuarteles y por eso han recomendado a las mujeres soldados que no vayan solas a las letrinas por la noche o que lleven siempre encima un cuchillo para defenderse en caso de ser atacadas.
Otro libro Dissent: Voices of Conscience de la veterana coronela Ann Wright, afirma que estos episodios se han vuelto ahora más vergonzosos a partir de que muchas mujeres han aparecido muertas después de haber sido violadas, a las que el Pentágono las califica como “caídas en situaciones no combativas”.
En la mayoría de los casos la impunidad es la tónica dominante no siendo llevados ante la justicia a los culpables de estos crímenes.
Escribe el resto de tu post aquí.
1 comentario:
Increíble que los soldados sean capaces de violar a sus propias compañeras.
Pienso que en los ejércitos, en todo el mundo, donde existan mujeres, deberían
tener métodos de aplicación permanente que eviten que estos casos de violación o acoso
ocurran, dentro y fuera de los cuarteles.
Publicar un comentario